El último heredero se presentó en el NAIAS 2018. Basado en el recién actualizado Mustang GT, aumenta su potencia hasta los 475 CV, gracias a un sistema de inducción proveniente del Shelby GT350 y nuevos cuerpos de aceleración. Estéticamente destaca por la ausencia de logotipos, ya que lo único que lo distingue es un detalle en el baúl con la leyenda "Bullitt".