Dos autos que marcaron una época de la F1. A mediados de los 70s, estos dos monoplazas se repartieron poles, GPs y campeonatos de la F1 de la mano de nombres rutilantes como Niki Lauda, James Hunt o Emerson Fittipaldi. La competencia entre las dos escuderías realzó la popularidad de la F1, y sin lugar a dudas, dejaron una impronta en La Máxima.