Mientras los puntos anteriores se trataban de una sola opción absurda, el W Motors Lykan HyperSport tiene tantas cosas que logró su propia mención específica. Es el primer súperdeportivo Árabe y como todo en esa región, es de lo más excéntrico, lujoso y por supuesto caro, que existe.
Aunque aún es un concept, ya se perfila para ser el auto más caro del mundo, más que el Aston One-77 y que el Bugatti Veyron, con un precio de 2.4 millones de euros. Esto se debe a la reducida producción de sólo siete unidades al año, pero eso no es lo que nos importa en este Top 10, sino el absurdo equipamiento con el que cuenta.
Las luces de Swarovski sonaban pretenciosas, pero las del Lykan HyperSport tienen incrustaciones de oro y diamantes reales. La tapicería esta zurcida con hilos de oro y encontramos incrustaciones de más diamantes en el interior o si el cliente así lo prefiere se pueden cambiar por rubíes, zafiros o esmeraldas.