Sin duda es el Golf con menos personalidad de la historia del modelo.
Tecnológicamente empezaron a innovar y proponer cosas muy interesantes que marcaron el rumbo de la marca, y me refiero a las motorizaciones turbo que montaban los GTi de aquellos años, un poderoso 1.8 L de 20 válvulas hizo las delicias de muchísimos "tuners" que lograban exprimirle potencia a niveles descomunales.
Con el “IV” nace una versión llamada 4Motion, dotada con tracción integral, un motor V6 con inyección directa y un embrague Haldex, que lo hacía veloz y muy capaz, pero con un elevado precio, por consiguiente fue un fracaso comercial.
Para los fanáticos apareció el R32, un auto de culto el día de hoy, que tiene en sus logros ser el primer VW de serie en desarrollar los 250 Km/h
Casi 5 millones de Golf se produjeron en ese período (4.99 millones).