Producido entre 1934 y 1957, este auto francés se destaca estaca en nuestro Top 10 por ser el primer auto de serie en utilizar estructura de carrocería autoportante. Esta técnica requiere manufacturar una sola pieza en la que el chasis y la carrocería forman una unidad inseparable. Esto permitió una importante reducción de peso, mayor estabilidad en el vehículo al disminuir la altura y por ende el centro de gravedad. Además incorporaba tracción delantera (de ahí su nombre) con suspensión independiente y barras de torsión. Inicialmente portaba un cuatro cilindros de 1.3L y su potencia era de 32 CV. Existió tanto en carrocería sedán, coupé y convertible.
