Los motores de avión fueron el negocio inicial de la Bayerische Motoren Werke (BMW) en 1916. Los pilotos de aquellos aviones decían que podían ver alternadamente el azul del cielo y el blanco de las hélices girando a gran velocidad frente a ellos mientras volaban.
En realidad no sabemos que tan cierta sea esa leyenda, lo que sí es real es que los colores de la bandera bávara son azul y blanco,y BMW los eligió como sus colores oficiales.
Después de la Primera Guerra Mundial, a BMW se le prohibió fabricar motores para avión y la compañía dio un giro para fabricar motos y más tarde autos, aunque retomó la manufactura de motores radiales para avión en los años treinta, instalados en los primeros Junkers de la compañía Lufthansa.
Hoy en día, el patrón de colores y la conformación original sigue adornado los capó de todos los BMW construidos.