La marca japonesa introdujo la tecnología de los motores VTEC en abril de 1989. Este es un sistema de apertura variable de las válvulas cuyo mecanismo es capaz de controlar la variación de la admisión en los motores de un árbol a la cabeza (SOHC) y de admisión y escape en los motores de doble árbol (DOHC). Cuando las revoluciones del motor se incrementan y la unidad de control electrónica recibe la señal del sensor de posición del acelerador, informando que se requiere de mayor potencia; traduciéndose en un incremento de aceleración en el auto. El sistema además le permitió a Honda ser una de las primeras marcas generalistas en ofrecer motores de 100 CV por litro sin utilizar turbo, con los más conocidos el 1.6L de 160 caballos y el siempre premiado en los International Engine of the Year el 2.0L de 220 a 240 CV empleado en bólidos como el S2000. La última vez que vimos una de estas maravillas en Argentina fue en el Civic Si de generación anterior.